Existe una creencia generalizada que nuestro pelo solo sufre las agresiones del astro rey en verano. Esta falsa creencia puede hacer que se dañe seriamente si no tomas medidas para cuidarlo también en invierno.
La llegada del frío también afecta a nuestro cabello, y mucho. El viento seco resulta especialmente perjudicial y si encima nos vamos a la nieve, el ataque de los reflejos de los rayos solares multiplica los posibles daños.
Por este motivo, antes de irnos de vacaciones, ya sea verano o invierno, es imprescindible que metamos en nuestro neceser, entre otras cosas, un filtro solar especial para proteger el pelo de las agresiones externas y sobre todo un buen cepillo.
Melena a prueba de frío
«La clave reside en evitar que se abran las cutículas de nuestro cabello. Si esto ocurre se pierde su queratina natural y el pelo se vuelve áspero y empieza a quebrarse. Una fórmula complementaria perfecta para mantener el pelo impecable es el alisado brasileño, que además de reestructurarlo, le da la fortaleza necesaria para aguantar agresiones externas», cuenta Lorena Martínez, estilista de Divinité Salón. En este Salón, especializado entre otros tratamientos en productos orgánicos, aconsejan también cuando acudes a la nieve cepillarlo de una forma más intensa, volando la cabeza y hacerlo desde la nuca hasta la raíz. Este truco es fabuloso para el cuero cabelludo que se resiente al sudar con el gorro o casco puesto.
Las expertas manos de las profesionales de Divinité Salón ponen a tu disposición toda su destreza para que goces de una melena perfecta. De todas formas, aunque tu cabello esté protegido con el alisado brasileño, hay una serie de consejos que no debes olvidar cuando te dispongas a pasar unos días en la nieve:
1. Utiliza un champú con PH neutro o sin sal para mantener el pelo limpio y con las cutículas cerradas.
2. Finaliza el proceso de lavado con un acondicionador nutritivo. En el mercado existen infinidad de marcas.
3. No es conveniente usar mascarillas a diario. Resulta más efectivo dejarlas para hidratar en profundidad el cabello una vez volvamos a casa.
4. Antes de salir a la nieve aplicar una generosa capa de protección solar.
