Tratamientos: protocolos que cuidan el cabello en invierno

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Las diferentes estaciones afectan a nuestro organismo, a su funcionamiento e incluso consiguen incidir en nuestro estado de ánimo. No es de extrañar que en invierno el cabello se vea resentido por el frío, el cambio de temperaturas, las calefacciones, etc. Por eso desde el salón podemos revertir los efectos de la estación invernal, así como del cambio de hábitos que todos llevamos a cabo según el momento del año en que nos encontremos.

El frío y el viento seco afectan negativamente a nuestro cabello, ya que pueden levantar ligeramente la cutícula, impidiendo que el tallo retenga la humedad y provocando así la deshidratación, el encrespamiento y en ocasiones, la rotura. Y estos efectos, se notan aún más si tenemos el cabello teñido, ya que afecta a la durabilidad del color que se ve antes apagado y sin brillo.

Además, si el clima es ventoso, en las melenas largas, rizadas o con el cabello grueso provocará más enredos, lo que puede ser sinónimo de tirones, rotura y puntas abiertas. “En todos los protocolos es importante atender siempre no solo lo visible, como son las fibras capilares, el cabello, también debemos atender al cuero cabelludo. En nuestro salón, recomendamos incluir un masaje que no solo relaje, también active la circulación sanguínea, la oxigenación. Cuando hemos pasado unos minutos trabajando sobre el cuero cabelludo, logramos calmar la zona e incluso a la persona, que será más receptiva y aprovechará mejor los activos que vamos a aplicarle.”, asegura Charo García, de Salón Ilitia (Valmaseda).

Una vez la persona está preparada para el protocolo, deberemos analizar y decidir cuál de ellos es el que mejor se ajusta a sus necesidades, teniendo en cuenta también el clima en el que habitualmente vive, si es un ambiente húmedo o seco, muy frío o con temperaturas moderadas. Para las zonas costeras “siempre recomiendo los tratamientos con algas marinas. Actúan de forma profunda y aportan nutrientes que reequilibran el cuero cabelludo y el cabello. La intensidad de sus activos corrigen la deshidratación, el exceso de grasa, caspa, la caída, etc. Y el resultado siempre comporta un fortalecimiento, una mejora del estado general y una fibra brillante y resistente.”, añade Raquel Saiz de Salón Blue by Raquel Saiz (Torrelavega).

En otras ocasiones, nos podemos encontrar que los daños que pueda presentar una melena no se deban tanto a fenómenos climatológicos, sino que el origen puede estar en tratamientos químicos inadecuados o un abuso de las fuentes de calor, lo que ha podido debilitar el cabello. A esto se le puede sumar los climas extremos, por eso encontramos tratamientos que no solo consiguen restablecer la hidratación, también revertir los daños y sanar la fibra capilar como los protocolos a base de ácido hialurónico, un ingrediente muy frecuente en los tratamientos de la piel, pero aún no tanto para el cabello, y que ofrece una gran eficacia. “El ácido hialurónico es una proteína presente en la piel, pero también en el cabello. Es la responsable de retener el agua, la hidratación, y ya sabemos que una fibra capilar dañada ha perdido la capacidad de conservar la humedad. Lo que hacemos cuando aplicamos ácido hialurónico es reforzar desde el interior, hacer el cabello más resistente y flexible, a la vez que recupera brillo, vitalidad y elasticidad para evitar roturas, y todo sin aportar ningún daño, ya que el ácido hialurónico forma parte de su estructura.”, explica Christian Ríos, del salón Christian Ríos Hair Couture (Vilanova y la Geltrú).

No obstante, la base de cualquier tratamiento comienza con la limpieza, la eliminación de los depósitos de restos de productos de acabado, grasa, suciedad e incluso tintes. Eso es que lo está provocando que se extiendan los peelings del cuero cabelludo con parte del inicio de un protocolo en el salón. “Realizar un peeling del cuero cabelludo es el primer paso para regenerar, ya que al eliminar todos los elementos que se han ido acumulando y que lo asfixian, permitimos recuperar el equilibrio y lo preparamos para poder aplicar un tratamiento sabiendo que va a ser aprovechado al máximo por la piel y por el cabello. Para recuperar una melena dañada, recomiendo un protocolo a base de ácidos, ya que reequilibra el pH. El cabello se resiente cuando el pH se ve afectado porque se vuelve alcalino y recupera su equilibrio cuando su nivel de pH es de 5.5. Sin embargo, el diagnóstico previo es sin duda la baza para realizar con éxito esta rutina.”, indica Ulises Mesa de Ulises Peluqueros (Santa Cruz de Tenerife).

En invierno, cuando el cabello se encrespa la causa puede ser por un doble motivo, la más frecuente es la falta de hidratación, el viento reseca mucho el cuero cabelludo, así como la fibra capilar. Sin embargo,  también puede suceder que la deshidratación se deba a que los diferentes tratamientos térmicos o químicos lo hayan debilitado. “Cuando realizamos color o abusamos de planchas sin la debida protección, la cutícula se daña y parte de la proteína que forma la fibra se pierde. Eso puede dar un aspecto resquebrajado y deshidratado del cabello, las escamas están abiertas y eso hace que el cabello se vuelva débil y poco resistente. En estos casos, es importante aportar a la melena todo aquello que ha perdido mediante los diferentes tratamientos, sobre todo la queratina o los tratamientos anti encrespamiento. Además, es básico recordar que el mantenimiento de los tratamientos en casa es muy importante.”, afirma Olga García de Olga García Estilistas.

En el salón se pueden regenerar melenas muy castigadas y apagadas y mejoraremos los resultados si además contextualizamos ese cabello, analizando su historia, los hábitos de cuidado, el compromiso de la clienta, el lugar en el que vive, etc. “Para melenas que dan signos de agotamiento, recomiendo tratamientos como la enzimoterapia capaz de reestructurar el cabello gracias a reponer la proteína que forman las fibras capilares y que se van perdiendo por el paso del tiempo, la climatología y todo tipo de procesos químicos o herramientas que hayan podido afectar seriamente al aspecto y salud del cabello. El resultado no es solo un cabello bonito y brillante, sino fuerte, elástico y saludable.”, defiende Anna Barroca, fundadora del salón situado en Andorra La Vella, Anna Barroca.