En esta colección el cabello parece suspendido en el aire, pese a que esta aparente ligereza no oculta su fuerza. Los contornos rompen con lo predecible y traen al presente una clara inspiración de la década de los 70 en los cortes, volúmenes y el trabajo de las texturas.
Los mullets evolucionan para potenciar la feminidad y actualizarse. Los colores marcan una clara intención de quién los lleva y demuestran no haber sido escogidos al azar, sino que se utilizan para proyectar su vibración. Revelan un divertimento y son un complemento más del total look que permite mostrarnos con autenticidad. Son escogidos desde la libertad para potenciar nuestra personalidad y no para disimularla, son mucho más que un recurso para enmascarar la edad.
En definitiva, una colección de imágenes que transpiran libertad, pero sin estridencias.
Peluquería_ Anna Barroca
Fotografía_ David Arnal
Maquillaje_ Anna González
Estilismo_ Anna Barroca
Modelos_ Flor Olivera; Belén; Elsa Moreno
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