Navidad: Glamour y Rentabilidad

luces

Ya está aquí la Navidad. Casi sin darnos cuenta hemos pasado del bañador a la bufanda: ¡el tiempo vuela! Y, también, el paisaje que nos rodea cambia: aparecen luces de colores por todas partes, las calles se engalanan y los escaparates alcanzan su máximo esplendor para intentar captar nuestra mirada y despertar el “gusanillo” del consumo desmedido que, año tras año, aparece por estas fechas. ¿Estáis preparados?

Por Gonzalo Zarauza.

El dinero fluye gracias a las pagas extra, las relaciones personales aumentan y el deseo por compartir el espíritu navideño conlleva asistir a comidas de empresa o a celebraciones con familiares y amigos. Los eventos y los compromisos sociales llenan nuestras agendas y las de nuestros clientes. Por todas estas razones, como profesionales de la imagen, tenemos que estar preparados para dar respuesta a todas las necesidades estéticas de nuestras clientas y ayudarlas a completar su look con el mejor peinado y maquillaje. Es el momento de convertirnos en auténticos consejeros para ellas, haciéndoles saber que regalar o regalarse belleza, siempre es un acierto.

Por todo esto, antes de que comience la temporada navideña, es importante hacer inventario para reponer todos aquellos cosméticos que son susceptibles de venderse con mayor facilidad y, sobre todo, los atractivos packs que nos ofrecen las marcas comerciales en estas fechas. Recuerda también hacer acopio de secadores, planchas y accesorios, tales como juegos de pinceles de maquillaje o de cepillos. Otra idea sugerente es ofrecer bonos regalo con diferentes importes para que puedan ser utilizados por las clientas a modo de detalle para familiares y amigos. Lo más importante a tener en cuenta: las ventas en el salón de peluquería se ven fortalecidas por algo que, aunque es intangible, tiene un peso enorme en las decisiones de compra de las clientas. Es, ni más ni menos, que la propia credibilidad del profesional. En pocas palabras, el valor añadido a la venta —y que las clientas no van a encontrar en los grandes centros comerciales— es el asesoramiento profesional y personalizado. Vienen a mi cabeza dos peluqueros a los que quiero y admiro y que creo que saben conjugar de forma impecable el título de este artículo: “glamour y rentabilidad”.

¡PREGUNTÉMOSLE AL EXPERTO!

Antonio Garrido

antonio garrido

Ejerció como Director Artístico de Cebado, pero su carácter polifacético le llevó a implicarse en otros proyectos como la coordinación de peluquería de la Barcelona Bridal Week, colaboraciones en desfiles y sesiones fotográficas. Ha publicado en revistas como Woman, Vogue, Cuore, Lecturas, etc. Es formador de profesionales, tanto en peluquería como en asesoría de imagen, y es autor del libro Anécdotas de peluqueros (Ed. Planeta). Toda esta actividad profesional la compagina con la dirección de su icónico salón del Carrer de Bori i Fontestà de Barcelona.

Peluquero, maquillador y asesor de imagen, desprende elegancia por los cuatro costados. Con una imagen impecable, es el “gentleman” de la peluquería española y un profesional con mayúsculas.

Gonzalo Zarauza: ¿Qué opinas de esa creencia de que los peluqueros somos más artistas que empresarios?

Antonio Garrido: La creencia existe, pero la realidad es que está totalmente desfasada. Si queremos que un negocio de peluquería funcione es imprescindible ser empresario, ya que únicamente la creatividad no es suficiente para rentabilizar el salón.

GZ: ¿Qué tipo de acciones pones en marcha, de cara a las navidades, para potenciar las ventas?

AG: Nosotros enviamos una felicitación navideña a nuestras clientas y, de paso, recomendamos algún nuevo servicio. Por último, invitamos a los clientes a un cóctel y un desfile navideño en nuestro salón. Este año está invitado el diseñador de novia y fiesta Jordi Dalmau, que nos presentará un avance de su nueva colección de fiesta.

GZ: ¿Cuáles son las tres virtudes de la peluquería española? ¿Y los tres defectos?

AG: Las virtudes son innumerables; de hecho, creo que la peluquería española está viviendo un buen momento. También encuentro una mejora increíble tanto en el continente como en el contenido, es decir, mejores instalaciones y equipamientos y una preparación de los profesionales mucho más alta. Pero sobre todo quiero resaltar el compromiso de sostenibilidad con la naturaleza, que nos lleva a utilizar productos más respetuosos con el medio ambiente, con el cabello y con la piel.

Hablar de los defectos siempre es más delicado, pero sinceramente creo que aún hay profesionales que siguen trabajando como hace 50 años y piensan que se puede mirar al futuro sin evolucionar. Por otra parte, creo que hay que aumentar la formación, sobre todo en dos campos: en la asesoría de imagen global, no sólo en cabello y facial, y en la gestión del salón.

Manuel Zamorano

manuel zamorano

Es uno de esos estilistas tocados por la varita mágica del éxito. Todo empezó con la presencia de su amiga Sara Montiel en la inauguración de su salón de Madrid, en la calle Doce de Octubre. Desde entonces ha sido un no parar, teniendo que conjugar su trabajo en el salón con colaboraciones con fotógrafos y revistas tan importantes como Vogue, Hola, Telva, etc.

Hace ya muchos años que Zamorano es, además, el estilista de cabecera de la productora La Fábrica de la Tele y su participación en programas de máxima audiencia le han convertido en uno de los peluqueros más populares del país.

Glamour, discreción y humildad son los adjetivos que distinguen a este compañero, querido y admirado por el conjunto de la profesión.

Gonzalo Zarauza: ¿Qué opinas de esa creencia de que los peluqueros somos más artistas que empresarios?

Manuel Zamorano: En lo que a mí respecta, estoy totalmente de acuerdo. Yo me considero mucho más creativo y artista que empresario. Tampoco los peluqueros en general hemos tenido una buena formación en los temas de gestión. En mis inicios nunca me preocupó excesivamente lo económico, solo quería ser feliz con mi trabajo. Sin embargo, a día de hoy veo que es un error y que el salón hay que dirigirlo como un negocio porque, al fin y al cabo, es lo que es.

GZ: ¿Qué tipo de acciones pones en marcha, de cara a las navidades, para potenciar las ventas?

MZ: Lo cierto es que no hago nada especial por ser navidad. Pero está claro que el negocio en estas fechas aumenta y preparar algunas acciones o promociones de ventas podrían ser ayudas interesantes.

GZ: ¿Cuáles son las tres virtudes de la peluquería española? ¿Y los tres defectos?

MZ: En pocas palabras: las virtudes son muchísimas, porque la nuestra es una profesión vocacional y eso hace que la mayoría nos entreguemos al máximo. Por supuesto, hay que añadir que somos vanguardistas y creativos. En cuanto a los defectos, el que más me llama la atención es lo poco que nos valoramos a veces a nosotros mismos. Por lo general, los precios son bajísimos para la calidad que se ofrece. Por último, creo que la peluquería tiene que actualizarse y alinearse más con el mundo de la moda.