Para la estilista Noelia Jiménez, el peinado ideal para una novia es aquel que adapta las tendencias para potenciar su personalidad, ensalzando su elegancia natural y evitando que se sienta disfrazada. Para esta temporada sus favoritos siguen siendo las trenzas y las ondas vintage, e incluye el moño twist para las clásicas, y la coleta baja y pulida para las más atrevidas. Maquillaje fresco y ligero, y un esmalte algo más sofisticado a juego con el outfit de los novios serán los complementos perfectos.
Los recogidos de este año se mantienen fieles a las trenzas, que siguen siendo un must que no falla. Las vemos deshechas, en buena armonía con un cabello suelto o en forma de moños trenzados, si se prefiere algo más elaborado. Es, sin duda, una modalidad de peinado que favorece a todo tipo de rostros, y aúna elegancia y naturalidad, y es totalmente compatible con bodas de campo, playa o ciudad. Las que tiran por los clásico tienen en el moño Twist, su con tiara y velo. Este recogido entre moño bajo y coleta, es elegancia y clasicismo por los 4 costados.
Como estrella invitada de la temporada entra con fuerza la coleta, consecuencia, sin duda, de ese giro de las novias hacia la comodidad y la simpleza. Noelia Jiménez apuesta por la coleta baja, con ralla al medio y sin volumen, con la base muy pulida, cediendo todo el protagonismo al vestido. Un menos es más que veremos mucho este año.
Si se opta por semirrecogidos, la tendencia es clara: son bajos y muy deshechos, nada rígidos, de estilo muy fresco e incluso algo desenfadado. Las novias más románticas los prefieren con ondas vintage, con o sin tiara o corona de flores, y las más sofisticadas prefieren unas ondas pulidas, con adornos metálicos.
Maquillaje
De igual forma que con el peinado, la novias de 2019 lucen un rostro fresco y natural, que trabaje la luminosidad de la piel con una base clara y ligera, con polvos minerales, para ocultar imperfecciones, pero dejando entrever sus elementos característicos, como determinados lunares o pecas. Las mejillas y labios van en tonos saludables, que vayan en armonía con la piel y que también aporten luz. Los ojos van perfilados con un fino eyeliner y sombras en tono tierra o rosadas, ideales para bodas de día y, sobre todo, para cejas pobladas, a las que hay que darle la forma adecuada, y peinarlas bien.
Manicura
En uñas hay numerosas opciones, pero lo ideal es conseguir ese toque que complemente nuestro look, o por qué no, el del novio. La tendencia se inclina este año por esmaltes básicos para lucir sutiles dibujos sobre una base de brillo. También se impone darle el toque nupcial a una manicura francesa con texturas de piedra o purpurina, buscando una decoración que combine con los complementos elegidos.
