12 mandamientos para el lavado perfecto

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Las prisas diarias pueden hacen que un gesto tan cotidiano como lavarse la cabeza no se haga a conciencia y como recomiendan los expertos. Como estos días el tiempo ya no es excusa es el momento de empezar a realizar correctamente el gesto más básico de la belleza del cabello. Adolfo Remartínez, creador de Nuggela & Sulé, nos explica los 12 mandamientos de un lavado perfecto.

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1. Comprueba que la formulación de tu champú no agreda a la piel ya que ésta puede reaccionar ante agresiones externas.

2. Tener en cuenta el estado del cuero cabelludo es un gesto esencial, ya que es en esta zona donde podremos detectar problemas de grasa, caspa, mala nutrición o caída de cabello.

3. Decide qué beneficios quieres potenciar: brillo, hidratación, nutrición, volumen, caída del cabello…

4. Conoce, de una vez, tu tipo de pelo: fino, normal o grueso.

5. Sigue la frecuencia de lavado perfecta. Si las condiciones de higiene lo permiten, lo ideal es lavarlo cada tres días. Si el cabello es muy graso, se puede lavar a diario con una sola dosis de champú.

6. Cepilla el cabello antes del lavado para desenredarlo y prepararlo.

7. Humedécelo con abundante agua tibia antes de aplicar el champú.

8. No te excedas con la cantidad de champú: es mejor trabajar bien la cantidad exacta.

9. No apliques el champú directamente en el cabello, deja caer sobre la palma de la mano una pequeña cantidad, frota hasta emulsionar y aplícalo sobre el cuero cabelludo.

10. Trabaja el champú sobre la raíz, masajeando el producto durante al menos tres minutos. Además, de esta forma se activa la circulación sanguínea lo que mejora la nutrición de la vaina epitelial. Repite la aplicación dos veces: la primera como gesto de limpieza y la segunda como masaje.

11. Deja que el resto del cabello se limpie con la espuma que va cayendo por medios y puntas, sin añadir más champú.

12. Aclara con abundante agua templada y finaliza con agua fría para un extra de brillo